La ciberseguridad se ha convertido en una parte vital del mercado actual. Siempre surgen nuevas amenazas que se implementan y dirigen a las empresas, lo que significa que los equipos de seguridad cibernética deben estar atentos para proteger la red corporativa y su negocio frente a las violaciones de datos imprevistas.
Para construir una estrategia efectiva de ciberseguridad, primero debemos comprender las amenazas que existen y las estrategias de seguridad que las organizaciones usan para mitigarlas. En ManageEngine, realizamos una encuesta reciente para estudiar varios enfoques frente a la seguridad cibernética. Nuestra encuesta titulada "Una mirada a la evolución de las amenazas cibernéticas y su impacto en todas las industrias", se dirigió a profesionales de seguridad de TI de todo el mundo en los sectores público y privado.
La transformación digital y el fácil acceso a Internet han beneficiado enormemente a nuestra sociedad, pero también han contribuido a la evolución de los ataques cibernéticos. En nuestra encuesta, el 35 por ciento de los profesionales mostró una falta de conciencia hacia la seguridad cibernética, y el 26 por ciento carece de controles adecuados para la seguridad cibernética.
Los métodos de ataque varían según el atacante y la seguridad de la red objetivo. Por lo tanto, las empresas pueden verse afectadas de diferentes maneras por los ataques cibernéticos. Podrían sufrir pérdidas de productividad, pérdidas financieras, daños a la marca o reputación, entre otras.
El alcance y la fuente de los ataques cibernéticos son bastante amplios debido al acceso generalizado a Internet y los continuos avances tecnológicos. Sin embargo, durante nuestro estudio pudimos identificar algunas de las áreas más comunes donde los ataques cibernéticos penetran las redes corporativas. Los correos electrónicos son la principal fuente de ataques cibernéticos, seguidos por los dispositivos distribuidos.
Las organizaciones utilizan diversos tipos de dispositivos, y protegerlos frente a las amenazas externas puede ser bastante demandante. No obstante, los profesionales de la seguridad cibernética deberían enfocarse primero en proteger los recursos más críticos y vulnerables. Según nuestra investigación sobre ciberseguridad, los servidores, teléfonos inteligentes y computadoras portátiles son los dispositivos más vulnerables en un entorno empresarial.
Existen varias formas en que se pueden violar los dispositivos de una organización. Según nuestro estudio, el malware y el phishing son los ataques cibernéticos más comunes en el mercado. Estos tipos de ataques causan estragos, afectan la productividad y generan gastos innecesarios para las empresas.
Dado que el malware es una de las principales preocupaciones de las empresas en 2020, queríamos identificar los diferentes tipos y sus impactos en las industrias. Seleccionamos cuidadosamente los tipos de malware más comunes como ransomware, troyanos, gusanos, spyware y adware para estudiar su impacto en las empresas. Según los resultados, descubrimos que el ransomware es la fuente principal de ataques cibernéticos, seguido de los gusanos.
Las empresas pueden superar estos desafíos cibernéticos al establecer algunos controles de seguridad básicos para sus negocios. Para hacer eso, deben comprender sus puntos de contacto críticos e implementar los controles adecuados para anular los ataques cibernéticos. Estos controles de seguridad se basan en el marco del Centro de Seguridad de Internet (CIS). En nuestra investigación determinamos que el inventario y el control de los activos de hardware son la principal preocupación para un negocio, seguido por el inventario y el control del software.
Dada la importancia de los controles de seguridad básicos, también preguntamos a los encuestados sobre sus necesidades de seguridad actuales. Los resultados muestran que la seguridad del navegador es una prioridad para muchas empresas, ya que la defensa contra malware encabeza la lista, seguida de la protección del correo electrónico y del navegador web.
Dicho esto, los controles de seguridad organizacionales juegan un papel crítico en comparación con los controles básicos y fundamentales. Estos otros dos niveles de estrategias de ciberseguridad no funcionan a menos que sus ejecutivos de nivel C contribuyan por igual. A continuación se encuentran nuestros hallazgos sobre los controles de seguridad organizacional y sus expectativas en el mercado.
Después de comprender los desafíos y procedimientos de ciberseguridad, es hora de la implementación, que puede ser una tarea exigente. Por lo general, el Director de Información (CIO) desarrollará e implementará una estrategia de seguridad informática, mientras que el administrador de TI senior ayudará a promoverla.
Una vez que estos controles de seguridad estén listos para implementarse, el siguiente paso es comprender qué factores se deben considerar para mejorar la seguridad general de la empresa. Según nuestra investigación, es una decisión acumulativa que depende de emplear las herramientas adecuadas, crear conciencia y reclutar profesionales calificados en ciberseguridad.
Las redes corporativas consisten en servidores, desktops, computadoras portátiles y dispositivos móviles, todos los cuales pueden ser víctimas de ataques cibernéticos dirigidos. Según nuestro estudio, determinamos que el mejor lugar para comenzar a implementar controles son los firewalls, seguidos de los endpoints.
En cuanto a la seguridad de dispositivos móviles, la principal preocupación es la gestión de la seguridad del correo electrónico, seguida de la gestión de aplicaciones.
Además, en cuanto a la gestión de la seguridad del servidor, la gestión del servidor virtual es una de las principales preocupaciones para la seguridad informática.
La gestión unificada de endpoints es otro campo de investigación interesante. Se incluyen casi todos los tipos de dispositivos, pero la principal preocupación de los profesionales de seguridad con respecto a los endpoints es la gestión de parches automatizada, seguida de la distribución de software y luego la gestión del Internet de las Cosas (IoT).
Por encima de todo, la investigación y los datos que obtuvimos mostraron que solo el 27 por ciento de las empresas implementaron los controles de seguridad críticos mencionados anteriormente, y el 73 por ciento aún no los ha implementado.